¿Cual fue tu primer recuerdo? Yo me acuerdo muy poco de mi infancia, pero uno de los primeros recuerdo que tengo es de ver gente en situación de calle como les llamamos ahora, en ese tiempo mis padres me decían que eran mendigos, yo solo veía la miseria humana y sufría, abuelos y niños en situación de calle a comienzo de los 90 en barrios como Pedro Agurre Cerda, donde nací era habitual. Con el paso de los años la pena por la situación de esas personas paso a convertirse en rabia, en ira hacia la injusticia y hacia quienes la permitían, crecí con ese odio a este mundo que permitía que seres tan inocente como niños pudiesen sufrir.
En mis tempranos 20 y propiciado por la maternidad es que comienzo a darle cause a esta energía, a transformarla en acciones concretas que ayudaran a quienes más lo necesitan y de forma voluntaria y autogestionada comencé a participar en intervenciones en campamentos, barrios vulnerables, ayuda animal y donde sintiera que podía aportar. Participe también en misión cárcel que pretendía apoyar a jóvenes dependientes del sename, a mostrarles otra realidad y apoyarlos de diversas formas. Pase todo mis 20 tratando de hacer un cambio desde mi posición, porque yo si creo que cada granito de arena cuenta, en cuanto los sumamos y formamos una playa completa, pero también en cuanto a con que prisma miramos la realidad, con que sentimientos y sensaciones queremos atraer a nuestra vida y para mi la misericordia y el amor al prójimo es una premisa. No me mal intérpretes, no soy tersa de Calcuta, lucho constantemente con la intolerancia, el odio que me producen ciertas situaciones, pero trato de no darle espacio a que permee en el espacio que me define como persona. Y si trato de darle espacio a lo que me mantiene vibrando bonito, y para mi por excelencia es la empaia, el amor al prójimo, la ayuda a los mas necesitados.
Desde que nació PanaCea a mis 31 es que hemos tratado de darle la vuelta para que esta empresa se aline con mi visión personal que compartimos con mi socio y marido, es por esto que desde un inciio este proyecto se gesto como una panaderia vegana, desde el día 1 nuestra idea fue ser lo mas rspoetuoso y empático con quienes nuestro negocio podía impactar, por eso siempre estuve en los planes compostar y reclijar a pesar de que recién 4 años después lo pudimos hacer. También siempre estuvo en nuestra idea de negocio el poder ser empáticos con nuestros clientres, vecinos de nuestra comuna, personas de esfuerzo como nosotros a los que no les es tan fácil acceder muchas veces a alimentación saludable.
A pesar de eso, hace algunos meses comencé a cuestionarme en que estaba mi negocio. La necesidad de poder hacer algo social estuvo presente a lo largo de todos estos años en los que hemos construido PnaCea, pero sentía que no lograba ni con estas diurectrices inciales de lo que pretendía ser nuestrio negocio llenar esta necesidad. Tuve que reconocer en el proceso algo que no reconoci cuando se supone que debía a mis 18 años. Necesito dedicarle parte de mi vida a la ayuda social, es creo, la forma en que el mundo empieza a tomar sentido, en el que tomo el control como buena virgiana, de la situación y siento de forma concreta queestoy entregando energías a construir la realidad que espero para este mundo.
Mas arriba te hable de niños en situación de calle, niños a los que sus derechos les fueron vulnerados. También fui una de esas niñas, ese periodo me dejo heridas que me acomnpañan hasta el día de hoy. Lo que nos pasa en nuestra ñiñez define lo que será toda nuestra vida. En ese tiempo construyes cimientos y que conformaran la base de quien eres.
Este año cumplo 36 años y la maría jose adulta que hoy soy quiere regalarle con mucho mucho amor, empatía, con respeto, con cariño a la maría jose niña y a todos los niñes, donde este proyecto llegara “Fundacion PanaCea los niños primero” que busca llevar alimentación saludable a niños y niñas donde habitualemnte esta alimentracion no llega. Para mi este proyecto busca sanar una herida personal, como un acto de psicomagia para agradecerle a mi niña interior por ser tan fuerte, resilente, amorosa, empática, por ser sensible y amar a los niños y a la naturaleza., agradecerle a mi niña interior por la pureza con la que aun logro mirar el mundo a pesar de ser una adulta. Agradecerle por ádrame los cimientos, la fuerza, el aguante y el coraje para vivir los primeros años difíciles de mi existencia, y por llenarme de inspiración para crear esta fundación. Y agradecerle a la vida la oportunidad transformar todo ese odio en amor.
Así que bienvenida @fundacionpanaceasaludable esperamos ser un aporte a la niñez de nuestro país, y esperamos contar con su apoyo. ¡Ya les estaremos contando!